Adaptarse al camino es esencial
La Vida Fácil tiene que ver con la capacidad de adaptación al terreno que estamos atravesando en cada momento.
Al igual que al caminar, en la aventura de la vida atravesamos por diferentes senderos, travesías, puentes, llanos, cumbres, precipicios, bosques frondosos, lugares húmedos o quizás helados. En cada uno de estos terrenos tendremos que adaptar nuestro caminar si no queremos dañarnos, si queremos disfrutar de un trayecto agradable y lo más fácil posible.
No correremos al borde del precipicio y andaremos despacio y con calma en zonas de hielo, cuando sea un camino empedrado adaptaremos nuestros pies a cada pisada para avanzar de manera segura y eficaz y en lo Llanos tendremos la oportunidad de reponernos, tomar aire y prepararnos para el siguiente tramo.

El calzado, la consciencia al caminar, la capacidad de adaptación y la decisión de continuar hacia delante nos ayudarán en el camino.
Todos vivimos momentos que nos ponen en la cuerda floja, en los que sentimos que ya no podemos más y que realmente todo se nos hace cuesta arriba. Y también es Real que está en nuestra actitud, el camino es el que es y eso no está en nuestras manos, pero modificando nuestra mirada y responsabilidad sobre el trayecto, el trayecto se vuelve distinto.
Podemos vivir el trayecto con alegría y comenzar a disfrutar del paisaje sea cual sea el tramo que estamos atravesando.
¿Cómo defines tu trayectoria?